miércoles, enero 26, 2005

Un momento contra los recuerdos...

Hace unos par de días tuve la dicha de ver -en mi opinión- una de las mejores películas del año 2000: Memento. El film, dirigido por Christopher Nolan, narra la historia de Leonard, un sujeto que sufre de una extraña enfermedad -que es real, vale la pena acotar- que no le permite generar recuerdos nuevos. Lo terrible de este padecimiento es que Leonard recuerda todo su pasado hasta el día que recibió un golpe en la cabeza, cuando intentaba detener a unos ladrones que violaron y mataron a su esposa. Siendo éste su último recuerdo decide buscar al asesino y vengarse. Por desgracia, Leonard pierde la memoria cada 5 minutos, así que le toma fotos a las personas que conoce y anota detrás de las mismas pequeños "tips" sobre ellas. Además se tatua en su cuerpo mensajes "claves" para no perder la pista de lo que hace y así seguir al asesino. No pienso contarles más; sólo me detuve a hacer esta pequeña reseña para que entiendan la esencia de este post.

¿Qué tan importantes son los recuerdos de una persona? ¿Vale la pena recordar cada instante de la vida? Si bien es cierto que a veces sólo queremos olvidar el pasado, ¿cómo sería vivir sin él? Éstas y muchas otras preguntas han estado rondando mi cabeza desde que vi Memento. La memoria siempre es inexacta y -querrámoslo o no- tiende a borrar y cambiar muchas cosas. Más de una vez se confunde un recuerdo con otro, a veces ni se puede recordar algún hecho en especial, lo único cierto es que sólo lo que se quiere recordar, es lo que se queda en la memoria. Y aún así, queriendo recordar un hecho en especial con claridad, siempre con el paso del tiempo -aquel verdugo que todo lo destruye-, algo se va distorcionando en él.

Si no se tuviera pasado y sólo existiera el presente, ¿valdría la pena inventarse un pasado mejor sólo para ser féliz? Aunque parezca mentira, sin padecer de ninguna enfermedad, muchas veces el ser humano hace esto. En ocasiones la gente recuerda sólo lo que quiere, creando su propia verdad. ¿Es bueno o malo? Total, si el pasado ya no existe ¿qué más da cambiarlo? Yo concuerdo con la película en que "todos necesitamos recuerdos para recordar quienes somos". El alterar el pasado sería como mentirse uno mismo. El pasado nos marca, y aunque hoy sólo sea un montón de recuerdos, éste fue alguna vez nuestro presente, el renegar del él sería como renegar de nosotros mismos. Aunque a veces se actué sin pensar y se condenen muchas decisiones tomadas, sin el pasado estaríamos condenados a repetir dichas acciones una y otra vez.

¿Hasta qué punto es valido permitirse olvidar algo que sucedió? En mi opinión, nunca se debe olvidar nada. Cada hecho, por doloroso o insignificante que sea, tiene infinitas repercuciones en la vida. Si se escribe y al mismo tiempo se borra nada tendría sentido; no se puede vivir atado a los recuerdos, pero tampoco se puede vivir sin ellos. La memoria es como un diario, sirve para escribirlo todos los días y hojearlo cuando es necesario, cuando se pierde el rumbo y se necesita recordar quienes somos. El presente, ese pequeño espacio que nos corresponde, a cada instante se convierte en un recuerdo. Así el pasado nos condene, nunca olvidemos que el aquí y ahora, este instante llamado presente, será el que tenga la última palabra. No hay que vivir en función al pasado, tampoco hay que olvidar quienes somos, sólo hay que estar concientes de todo lo que hacemos, ésta es la única manera de poder crear un futuro mejor. Un futuro que algún día se convertirá en un hermoso instante que pasará a formar un dulce recuerdo.